La idea principal sobre la que se quiso construir la idiosincrasia de la papelería para nuestra empresa fue la sobriedad, de la misma forma que con el logotipo. El mismo isotipo debería jugar un papel importante en la composición de esta.
En el caso del sobre se buscaba un juego con la simetría y la continuidad de las líneas en el logotipo. De manera parecida funcionaba en la propia carta, que utilizaba líneas perpendiculares en las aristas inferior y derecha para recoger el texto mientras que la esquina superior izquierda compensaba con el logotipo completo. Para la tarjeta de presentación se quiso jugar con los espacios negativos y la proporción áurea. Sobre esta misma proporción se construye la tarjeta y en ella está libre un cuadrado perfecto blanco sobre el que se escribe la información y favorece un nuevo rectángulo áureo negro sobre el que va el isotipo en blanco. Las puntas de la tarjeta serían redondeadas buscando ergonomía y comodidad para el cliente.
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